SANTO RUSO: —Adapta tu vida a tu fe, no el contrario

La vida de San Seraphim (Sobolev), Arzobispo de Bogucharsk, era vinculada estrechamente con dos grandes santos – San Nicholas él que hace milagros y Seraphim el Venerable de Sarov. Al santo le dieron el nombre Nicholas al nacer y él servía la Iglesia de San Nicholas hasta su muerte. Inspirado por el mayor de Sarov, Nicholas renunció el mundo para la vida monástica en la que recibió el nombre de Seraphim. San Seraphim aprendió mucho por ambos de sus patrocinadores celestiales y era famoso por su santidad ya en su vida terrenal.

Nikolai Sobolev se nació en Ryazan (Rusia) en 1881. La vida de su familia no era fácil. Siete de sus doce hermanos y hermanas se murieron en sus niñeces mientras su padre sufría en una enfermedad crónica. A pesar de eso, oración y fe en la Providencia de Dios siempre vivían en su hogar.

Después de su graduación del seminario y escuela teológica en su pueblo natal, Nikolai entró en la Academia en San Petersburg. Mientras estudiaba allí, él visitaba a San Juan de Kronstadt y al mayor del skete Gethsemane, Isidor (Kozin). En el cuarto año de la academia, Nicholas fue tonsurado como monje con el nombre de Seraphim. Después de terminar sus estudios, él escribió su primera obra espiritual y recibió un título en teología. Viendo este don de Dios en él, el santo dedicó toda su vida futura a la teología.

En 1912, al Hieromonje Seraphim le concedieron el rango de archimandrite. Él servía en escuelas y seminarios, mostrando mucho amor por sus estudiantes, que ayudó a subir a estas instituciones a un nivel más alto

En 1920, en Crimea, Archimandrite Seraphim fue ordenado un obispo y fue forzado ir a Bulgaria de inmediato por la entrada de los Bolshevik en las tierras de Crimea. Cuando llegó allí, Vladyka (Padre) fue designado para dos posiciones, que resultaron ser para toda la vida – rector de la Iglesia de San Nicholas en Sofia y administrador de parroquias Ortodoxas Rusas en Bulgaria.

San Seraphim organizó una fraternidad para cuidar a los feligreses pobres y un comité para apoyar económicamente a monjes rusos en el Monte Athos.

Sufriendo severamente de tuberculosis, el mayor venerable nunca dejó que la enfermedad afectara su servicio a Dios y a su prójimo.

Por su pureza espiritual, San Seraphim recibió de Dios el don de clarividencia. Muchas veces recordaba a gente que venía a confesión sus pecados olvidados y consolaba a los que estaban de luto, prediciendo cambios buenos en su vida futura.

En 1934, Obispo Seraphim fue alzado al rango de arzobispo. Sin embargo, esto no cambió su estilo de vida humilde de ninguna manera. Él seguía viviendo en su apartamento de la calle Veliko Tarnovo sin servicios. Era allí que pasaba sus noches escribiendo sus multiples obras teológicas preciosas, daba de comer y alojaba a los necesitados y recibía a sus hijos espirituales. También era allí donde terminó su viaje terrenal el 26 de febrero de 1950. Simbólicamente, la fiesta del Triunfo de Ortodoxia, al que San Seraphim dedicó su vida, fue celebrada aquel día. Siete parroquias rusas en Bulgaria fueron admitidas en el Patriarcado de Moscú por los esfuerzos de San Seraphim.

En 2016, Arzobispo Seraphim de Bogucharsk fue glorificado como un santo por la decisión unanime del Consejo.

Con su don de notar las desviaciones más sutiles de la verdad Ortodoxa, él denunciaba herejías y amonestaba a Cristianos en sus escrituras:

—Quédate totalmente fiel a nuestra fe santa Ortodoxa en ambos sus canones y sus dogmas. Adapta tu vida a tu fe, no tu fe a tu vida…Entonces serán hijos verdaderos de la Iglesia Ortodoxa y el Señor les darán en abundancia Sus bendiciones indecibles mientras todavía están aquí.—

—Intenta no estar ofendido por nadie. Nunca te enojes. Nunca insistas. Cuando algo no se hace a tu manera, di, —¡Gracias, Señor!— Tienes que refrenar a ti mismo.—

—Oración ostentosa revela el grado más alto de engaño. Intenta comportarte un poco como Vasya, el tonto santo a quien visité una vez. Él oraba sin cesar pero cuando oyó que se acercaba una de las monjas, él se acostó de inmediato y empezó a roncar. Eso es cómo se hace.— 

—Debes siempre llevar contigo una libreta para escribir cualquier pensamiento malo que podría aparecer, aplastándolos como insectos.— 

—Si desaliento te encuentra, lee las vidas de los santos. Intenta leer unas líneas de ellos por lo menos. Son como una lluvia llena de gracia que refresca, nutre, y complace el alma.— A Vladyka Seraphim le gustaban mucho Las vidas de los santos por San Dimitry de Rostov y él leyó toda la colección 11 veces durante su vida.

—Lee la Oración de Jesús, aporreando la palabra —Señor— o —Cristo— como un clavo en tu corazón. Entonces la gracia capturará tu corazón gradualmente y el nombre del Señor lo limpiará de los pensamientos impuros.— 

—Recuerda – nada hecho por obediencia puede causar algo mal.— 

—Cuando te ofendes, guarda silencio y encontrarás humildad. No es necesario, sin embargo, estarte silencioso sólo con tu boca, sino debes estar silencioso también con tu corazón.— 

Un hijo espiritual de San Seraphim una vez le compartió que era difícil para él mantener su atención en las palabras de oración. A eso, Vladyka dijo, —De esto se trata todo. Obligándote constantemente para prestar atención y alineando tu mente con tu corazón es la única manera de obtener oración verdadera.— 

—Cuando encuentras tiempos difíciles, escríbeme una carta..y déjala en mi tumba. Si recibo misericordia del Señor, te consolaré y te ayudaré.— 

La última morada del alma del arzobispo fue hecho clara inmediatamente después de su muerte por las peticiones de oración de creyentes realizadas que fluían de su tumba. Hoy más que cien casos de su ayuda milagrosa se saben. Entre ellos son milagros de curación y salvación de la muerte y también los dones de tener una familia y venir a la fe.